¿El vino beneficia la salud mental? Un estudio dice lo contrario

Se ha dicho en muchas ocasiones que una copita de vino al día beneficia considerablemente al organismo, sobre todo al cerebro. Tal afirmación ha generado suspicacia en algunos ámbitos, pues muchas personas creen que son inventos de las grandes marcas o de borrachines que quieren justificar su adicción.

Pues, para salir de dudas, el British Medical Journal publicó una investigación, el pasado 6 de junio, en la que determinó los efectos negativos que incluso el hábito de beber moderadamente puede causar en el cerebro.

El estudio llamado Whitehall II poseía números que datan desde hace 30 años. Durante el mismo, los expertos monitorearon el desempeño de civiles británicos desde 1985 hasta 2015, con una dieta de consumo constante de alcohol. Esta, desarrollada por las Universidades de Oxford y de Londres, vigiló la estructura y la función del cerebro en 550 sujetos y evaluó sus actuaciones en pruebas de fluidez lingüística y memoria de corto plazo.

Los participantes también fueron sometidos a resonancias magnéticas para determinar si existía algún indicio de enfermedad cerebral como Alzheimer. El estudio determinó que aquellos que ingirieron más alcohol presentaron mayores cambios en el cerebro con el paso de los años.

Logró verificar que el maltrato de la materia blanca y la disminución de la fluidez del lenguaje se acentúa en personas con mayor consumo de alcohol. Sin embargo, los resultados pueden estar alterados por otros factores.

El estudio tiene ciertas limitaciones, al igual que todos. Entre las posibles causas de alteracionesestá el hecho de que fueron los mismos participantes quienes reportaron la cantidad de alcohol que bebieron. Además, el experimento no toma en cuenta otros elementos fundamentales como el estilo de vida o el nivel de coeficiencia intelectual.

Tal información fue dada a conocer por Anya Topiwala, coautora del proyecto, quien trató de ser un poco más realista con respecto a los datos arrojados. “Necesitamos tener en cuenta que esto fue tan solo un estudio y que necesitamos seguir adelante con la investigación”, fueron palabras de Topiwala para el portal Wine Spectator. Agregó que todavía queda mucho que responder para determinar las consecuencias del alcohol en el cerebro.

Todo lo contrario

Por otro lado, un reporte publicado en días recientes basado en estudios del Instituto de Investigación de la Ciencia de los Alimentos de Madrid y las universidades de Reading e Illinois, comprobó que el vino rojo protege el cerebro de enfermedades degenerativas como el Alzheimer o el Parkinson.

Este fue publicado en el diario Frontiers in Nutrition, y dio buenas señales de que los metabolitos producidos por el vino protegen las células cerebrales de la disfunción y la muerte, procesos que se intensifican bajo condiciones de estrés o enfermedades.

Lo cierto es que sin saber a quien creerle, el vino no pareciera generar mayores complicaciones, aunque nada en exceso es beneficioso.

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