La agricultura biodinámica, ¿por encima de la ecológica?

La agricultura biodinámica es un modelo capaz de resolver los grandes retos a los que el sector ha de enfrentarse en los próximos años: una lluvia cada día más escasa, suelos más degradados y una demanda de alimentos cada día de mayor calidad. “Y para esos retos la agricultura biodinámica tiene todas las respuestas”, asegura Noelia Rodríguez, directora del curso que estos días se celebra en la sede Antonio Machado de Baeza. El futuro pasa por este modelo frente al resto de modelos ecológicos y tradicionales. Y es que la agricultura biodinámica es la única que garantiza que los alimentos que se producen son los más completos para alimentar al ser humano.

La principal diferencia entre las agriculturas ecológica y biodinámica es que la primera se rompe la cabeza en incorporar a la tierra aquello que el agricultor cree que falta mientras que la biodinámica garantiza mucho más: “Crea las condiciones en el suelo y en la granja para que sea la naturaleza la que decida en cada momento y en cada lugar lo que es necesario. Ese es el cambio de pensamiento que se está viviendo”, asegura Noelia Rodríguez.

El porcentaje de productos biodinámicos que en la actualidad se consumen es muy reducido porque se produce muy poco. Pero un dato esclarecedor es que las familias buscan, y por tanto consumen cada vez más, potitos biodinámicos para alimentar a sus bebés frente a los ecológicos. Y la paradoja es que existen productos de este segmento que son más baratos que los ecológicos. Noelia Rodríguez cree además que en la biodinámica existe una cultura y una ética más preocupada por lo social que en el mundo ecológico.

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