
La guerra de semillas por deficiencias en suministros
- Agricultura
- 31/05/2017
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Finaliza mayo y el proceso de siembra comienza un mes después del ciclo de invierno. Ministerio de Agricultura Productiva estima sembrar 380 mil hectáreas de maíz y Fedeagro advierte insuficiencia en abastecimiento de insumos.
La tierra está fértil. Hambrienta de producir, de reventar las semillas para aflorar arbustos de maíz. Según Fedeagro, el ciclo de siembra comenzó sujeto a “emergencia” por el suministro. Y es que apenas tiene acceso a 30 por ciento de la materia prima importada por Agropatria. La empresa estatal “ha repartido lo poco importado a programas públicos y margina la venta de insumos a productores de trayectoria”.
Wilmar Castro Soltedo, ministro de Agricultura Productiva, desmiente las deficiencias en la distribución de semilla y carga señalamientos. “Más allá de las posiciones infames de algunos directivos de Fedeagro, especialmente aquellos que hoy han sido descubiertos en cuanto a las trampas, manipulación y especulación con los insumos que se les otorgaban, hoy en Portuguesa tenemos garantizado el 100 por ciento de las semillas de maíz y fertilizantes que se requieren para poder sembrar 380 mil hectáreas en este ciclo”.
El ministerio omite destacar qué pasará con los ciclos de Yaracuy, Carabobo, Barinas y Guárico, donde se programa cultivo en el ciclo de invierno. Fedeagro pide responsabilidades a los anuncios de Castro Soteldo. “Si eso es cierto los invito a hacer público a quien han vendido semillas, agroquímicos y fertilizantes”, publicó Aquiles Hopkins, presidente del gremio, en su cuenta de Twitter.
El retardo de siembra pone en riego los resultados de la producción de maíz para tener la arepa segura en la mesa del venezolano al día. Werner Gutiérrez, ingeniero agrónomo, explica que en Portuguesa, estado de mayor cultivo, la plantación inicia el 15 de abril con el ciclo de invierno. Se empieza a “sembrar en la primera semana de mayo”. Hacerlo después es bajar el rendimiento, lo que supone al productor “más costos” sobre lo que obtendrá.
“Si se pasa el momento” como sucedió, los agricultores cambian de cultivo porque “sabe que el rendimiento de maíz baja entre 20, 30 y 40 por ciento, lo que va a tener no permite cubrir los costos de producción”, precisa Gutiérrez. Y es que el tiempo perdido no se recupera por el factor climático.
Luego de Portuguesa, la siembra debió continuar con Yaracuy y Carabobo. En junio será Barinas y Guárico a mediados de julio. Retardar el arranque con el mayor productor interrumpe la cadena y alerta bajas. “Muchos agricultores no se arriesgan a sembrar” por las consecuencias y pérdidas que se ocasionan en el período.
Las cuentas del ministerio varían y suponen otra realidad. En Portuguesa se estima que por cada hectárea son 30 kilos de semilla de maíz, lo que significan 11 millones 400 mil kilos de semilla en 380 mil hectáreas, que anuncia el despacho. Según registro del puerto de Puerto Cabello, al país arribaron el 22 de mayo un millón 265 mil 966 kilos, abastecimiento capaz de cubrir 42 mil 198 hectáreas, 11,10 por ciento de la propuesta oficial.