
Negocio redondo de las importaciones concentra el interés del Gobierno
- Agricultura
- 16/01/2017
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Sincerar la situación del campo venezolano y ponerse a trabajar a tono con lo que plantea el sector productivo nacional, sería lo ideal para comenzar a mejorar las condiciones económicas y sociales del país, al menos eso es lo que opina el asesor agropecuario y productor agrícola, Ramón Herrera.
“Estamos en una situación en la que se les pide a los productores que sigan adelante, pero el Gobierno hace caso omiso a sus planteamientos; ahí está el caso del maíz, cuyo precio no cubrió las expectativas del sector”, resaltó.
También –apuntó- hay planteamientos que ha hecho Fedeagro de trabajar en conjunto, de hacer una inversión importante en el campo, y no se le ha hecho caso, porque todavía sigue siendo el interés del Gobierno manejarse con las importaciones, que aparte de que le solventan el problema político que tienen, también le solventan el problema económico de los que intervienen en esas negociaciones, porque ahí hay negocios redondos con los dólares preferenciales.
Señaló que es preocupante que el ministro Wilmar Castro Soteldo esté hablando de la posible producción de este año 2017, dando números exactos, sin haber solventado los problemas. “Ellos siempre dan cifras, pero cuando vamos a la realidad es completamente distinta, porque la mayoría de la producción es la que está en los puertos; estamos importando el 75% de lo que consumimos”, detalló.
“El Gobierno debe poner en mano de los productores una inversión para poder salir adelante, con una planificación bien organizada y fiscalizada para lograr el éxito. Asimismo, debe dar la libertad a las asociaciones y productores para tener acceso a sus insumos”, insistió Herrera.
Cada vez peor
Ramón Herrera señaló que de continuar con las mismas políticas, la situación del campo venezolano será cada vez peor, destacando que en la actualidad hay problemas con las hortalizas. “Vamos a tener problemas con la papa, la cebolla, el tomate, el cilantro, la zanahoria, que serían un paliativo para la alimentación del pueblo pero que no se ha podido sembrar en la cantidad que se requiere porque escasea la semilla”, detalló Herrera.
A esto –continuó- hay que sumarle la inseguridad, que sigue siendo un factor importantísimo en el campo; ahora, la gente está sembrando menos porque les llegan bandas a las fincas, descosechan completamente el rubro y se lo llevan, quebrándolos prácticamente en ese momento.
-Este es un nuevo problema de inseguridad que es derivado de la situación económica del país, porque están robándose lo que se siembra para consumir y vender informalmente ante la escasez y altos precios en el mercado. Se están robando lo poco que se puede producir, lamentó.